El año pasado, en una de las calles por donde vivo, vi a unos niños – acompañados con su mamá – vendiendo limonada en la puerta de su casa. Como uno de ellos había sido compañerito de Álvaro en el… seguir leyendo
El año pasado, en una de las calles por donde vivo, vi a unos niños – acompañados con su mamá – vendiendo limonada en la puerta de su casa. Como uno de ellos había sido compañerito de Álvaro en el… seguir leyendo