Mi traductor oficial y las terapias de lenguaje
Cuando Álvaro pasó al su segundo año de Nido y comenzábamos a experimentar todo el stress vinculado a definir a qué colegio finalmente ingresaría (el pobre tenía la doble «responsabilidad» de abrir el camino para él y también para su hermano menor jajaja), la profesora no tuvo mejor idea de acelerarme las palpitaciones observando que aún no pronunciaba algunos fonemas propios de su edad y que requería de terapia.
Al principio, picona, no me gustó nada la observación. Yo era de la idea de que las palabras le fluirían conforme iría creciendo, más aún cuando yo le entendía TODO jaja. Pero, mi esposo insistió y finalmente lo metimos en la famosa terapia, repitiéndome que no me lo recomendarían a no ser que fuera estrictamente necesario.
Movida por la curiosidad, un día me senté a observar que hacían durante la terapia, y la verdad no era tan «aburrida» como pensaba, al contrario Álvaro la pasaba bien :). Finalmente, como ya les conté, ingresó al colegio que quería y salió excelente en la primera evaluación -que les toman cuando ya había ingresado-.
Pero cuando le tocó hablar a Alejandro, se complicaron un poco las cosas. A pesar de ser su mamá y asumir que DEBO entenderlo, habían -hasta ahora- ocasiones en que no decifro ni papa!! La terapia en este caso cayó por su propio peso y felizmente a él le gusta y la disfruta, porque su profesora se encarga de imprimirle un tono lúdico a las sesiones. Ahora, algunos meses después, ya son menos las palabras que no puede decir con claridad. En todo caso, lo bueno es que en esos momentos de «dificultad comunicativa» viene a mi rescate la vocecita de mi pequeño traductor diciendo «Mamá!! o Papá!! Mi hermano esta diciendo que…» Es Álvaro, que no sé cómo puede comprender todo lo que su hermano dice jajaja porque a veces lo que dice Alejandro es tan enredado, sobretodo cuando habla rápido!! jajaja
¿Será que los hermanos mayores entenderán el lenguaje de los bebés o de sus hermanos menores? A veces pienso que sí, porque como Álvaro y Alejandro se llevan menos de un año pienso que le entiende TODO! Debo confesar que me saca de apuros jajaja
¿A cuántas de ustedes les ha pasado que su hijo mayor se convierte en el traductor de su hermanito menor? o ¿Cuántas mamis creen que la tarapia podría ayudar a sus engreídos?
Me cuentan 🙂