A que niño no le da ilusión pensar que va a ir a visitar a Papa Noel y que no solo lo va a ver, sino que también se va a tomar fotos con él y quizá intercambiar un par de palabras con la persona que está detrás de ese disfraz J y que, en su inocencia, piensa que es el “verdadero” Papa Noel.
Al menos Álvaro, que ya está un poco más grande y entiende a su modo lo que representa la Navidad (el “cumpleaños” del niño Jesusito), le encanta la idea de ver a Papa Noel (que en su Nido – inteligentemente a mi manera de ver – le han dicho que es el buen hombre que ayuda al niño Jesusito a repartir todos los regalos que él envía a los niños de todo el mundo que se portan bien); y mi querido Alejandro imita todo lo que hace y dice su adorado hermano mayor, solo que, como el todavía no habla, solamente alcanza a decir “jo jo” para identificarlo ¿No es lindo?

Hace tiempo había visto que en el Jockey Plaza estaba la casa de Papa Noel y lleve a mis engreídos a dar un paseíto para que se distraigan y se empapen aún más del espíritu navideño.

Les muestro algunas fotitos con sus caritas llenas de emoción y felicidad.
Aquí, con el esperado Papa Noel (alias “jo jo”). No podían más con la emoción J nótese la alegría de Alejandro y la seriedad de Álvaro J
Luego dejaron su carta de los deseos para esta Navidad en el pozo de los deseos J
Y yo no me pude resistir J

¿Alguien más fue a la casa de Papa Noel? J
Mónica